"Rezad para que esto no suceda en invierno".

11 Diciembre 2021 , Escrito por EliasBautistaLeónDeSanMarcos Etiquetado en #Apocalipsis, #Fe, #Iglesia, #Profecías, #actualidad, #cristianismo, #religión, #teologia

Es curioso como una nevada más o menos espectacular o una inundación de las gordas consiguen paralizar el país y acaparar todos los noticiarios hasta el punto de desplazar el "tema del siglo" como ha sido, y sigue siendo en mayor o menor medida, la pandemia y la vacunación.

Estos meses hemos visto cómo la parte importante de los telediarios se la disputaban entre el "post-covid" y el volcán de La Palma.

Estas nevadas, inundaciones, terremotos y erupciones -las cuales también han tenido su dosis de polémica y "sucesos extraños"- tienen al menos la virtud de recordarme las palabras de Nuestro Señor Jesucristo cuando, hablando del Fin de los Tiempos, nos dice en el evangelio de S. Marcos "Rezad para que esto no suceda en invierno". También en el de S. Mateo está consignado como "Orad para que vuestra huida no suceda en invierno, ni en día de reposo".

barroco, catolicismo, cristianismo, arte religioso, pintura, iconografía — El Juicio Final, Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos 1673; óleo sobre lienzo (Iglesia de San Francisco, Bogotá)

Estos desastres naturales, que no son ni con mucho únicos, ni siquiera en nuestro mediterráneo y soleado país, nos ha recordado -una vez más- que con un frío "de verdad" como lo hubo a principios de este año que ya vamos a dejar atrás, uno de los inviernos más espectaculares de los últimos tiempos, todo puede empeorar seriamente; que las fronteras se colapsan, las carreteras se imposibilitan, los vehículos se convierten en trampas mortales. Las casas pueden derrumbarse o convertirse -aún más con la pobreza energética y las dificultades económicas- en tumbas heladas. Que los "sintecho" mueren congelados en las calles y otros provocan un incendio tratando de calentarse de formas arriesgadas.

Si añadimos una inundación por aquí, una erupción por allá y la economía general, tenemos un panorama bastante inquietante.

Mientras, sufrimos una "tribulación como nunca antes se había visto" con unos virus globales que llegan donde jamás pudo suponer ninguna persona de la antigüedad y que causan números de víctimas tan altos como la superpoblación mundial actual admite, y para el cual solo tenemos como remedio un experimento genético, no aprobado por las agencias del medicamento y que no solo no inmuniza, si no que hay que inocularse una y otra vez, y que está causando una segregación social y una estigmatización contra los que no se inoculen, casi comparable con las persecuciones raciales más horribles que sucedieron en el siglo XX.

Arte, pintura, cuadros, oleo, santos, juicio, fin del mundo — El Juicio Final, Alejandro Salas 1879 (copia del original de Hernando de la Cruz, 1629) Iglesia de la Compañía de Jesús, Quito

¿Llega ya el tiempo del anti-papa, del anti-cristo? ¿Cual es la "Marca de la Bestia" sin la que no se podrá "comprar ni vender"? ¿Es esta una de tantas tribulaciones como han habido en la historia, o es la Gran Tribulación?

Independientemente de cuándo llegue el fin del mundo, deberíamos vivir siempre como si fuera a ser mañana. Mantengámonos en oración.

Oración a S. Sebastián:

Glorioso e invicto mártir San Sebastián

insigne protector de los afligidos

que ponen su confianza en Dios

y esperan de su benigna mano

el remedio de sus aflicciones y necesidades.

Os suplicamos, como abogado que sois

contra todo contagio, peste y epidemia,

libreis con vuestra intercesión

nuestras casas de todos los males.

San Sebastián, santo patrón contra epidemias y desastres, ruega por nosotros.